Declaración sobre la propuesta del FDA para la vacunación contra el COVID una vez al año

Comentario público de Rob Wallace, PhD, presentado al Comité Asesor de Vacunas y Productos Biológicos Relacionados de la FDA con respecto a los futuros regímenes de vacunación que abordan el COVID-19.

Soy epidemiólogo evolutivo. Mapeé filogeografías estadísticas, incluidos rastros evolutivos moleculares, para HPAI H5N1 bajo la supervisión del asesor del CDC, Walter Fitch, en UC Irvine. ^1-2He consultado para el CDC y estoy comentando aquí en nombre del CDC del Pueblo.³.

Una suposición subyacente del borrador de las recomendaciones del VRBPAC sobre el cambio de la composición y el programa de vacunación contra el COVID-19 es una supuesta analogía entre el SARS-CoV-2 y la influenza. Las metáforas son necesarias, pero a menudo problemáticas. Comparar dos problemas no los hace iguales, una distinción bien explorada en la ciencia.⁴ El documento informativo del FDA sobre el tema va y viene entre reconocer la falacia y complacerla.

Hablaré sobre un tema técnico aquí, pero mencionaré de paso los esfuerzos de la administración actual para poner fin a la pandemia por decreto que por hecho, desde la recomendación de mayo de 2021 de que los vacunados no necesitan tapabocas hasta el memorando de Impact Research.⁵Estos esfuerzos documentados sitúan el presente asunto en una economía política más amplia. Al enmarcar su respuesta a COVID-19 en el modelo de influenza, el comité asesor corre el riesgo de convertir la causa, el virus, en algo que desearíamos que fuera: como la influenza.

La vacunación contra la influenza, tan mediocre como es, funciona en parte porque podemos predecir qué cepas sembrarán la pandemia del próximo año.⁶Fitch y sus colegas demostraron que las cepas H3 más evolucionadas en 18 codones casi siempre servían como progenitoras de la pandemia del próximo año.^7-9.

Ha habido algo de trabajo en esta dirección sobre el SARS-2, pero incluso bajo modelos optimistas, los parámetros de población actuales no nos sitúan cerca del tipo de endemicidad asociado con la influenza estacional.^10-12Los equilibrios puntuados en un cronograma creado por el propio virus, no el de la producción industrial o cualquier otro objetivo más amplio, están a la orden evolutiva del día. Y no tenemos un control sobre ese cronograma, excepto quizás, como mostró un trabajo reciente, las variantes del SARS-2 se están propagando más rápido que antes al emerger y la velocidad de la llegada de varias subvariantes de Omicron no fue disuadida por el nivel de vacunación de la población.¹³.

Las implicaciones son dobles. Restringir la vacunación a una vez al año solo limitaría aún más una respuesta de salud pública que ya está limitada por el abandono de las intervenciones no farmacéuticas. A nivel clínico, la vacunación por sí sola ofrece una mejor protección pero no garantiza contra la reinfección y el COVID prolongado.^14,15A nivel evolutivo, los modelos de Okamoto et al. muestran que perder NPI probablemente selecciona cambios en la estrategia reproductiva del SARS-2 y la aparición de cepas resistentes a la vacuna^16,17.

En resumen, la prevención, que evita que las personas se infecten en primer lugar, sigue siendo una contribución fundamental para preservar la eficacia de la vacuna. En la otra dirección, reducir los grados de libertad que tenemos en los tipos y la programación de la producción de vacunas solo agrava el daño a la salud pública que produce la eliminación de las campañas de NPI, como los mandatos de máscaras y el rastreo de contactos.¹⁸.

En segundo lugar, la justificación aquí detrás de la simplificación del programa de vacunas es totalmente incorrecta. No es la programación actual lo que mantiene la cobertura de refuerzo en un poco más del 16% de los estadounidenses elegibles¹⁹Es la insistencia en declarar que una pandemia aún evoluciona rápidamente y terminar con todos esos programas lo que habría ayudado a que los programas de vacunación tuvieran éxito. El éxito de las campañas farmacéuticas federales depende de las campañas de NPI que van de puerta en puerta y que abandonaron dos administraciones. No ponga en práctica una intervención que se base en culpar a los estadounidenses no vacunados por ese fiasco.